Parques de trampolines se han vuelto cada vez más populares en las actividades de entretenimiento actuales. Sin embargo, no todo el mundo es apto para este estimulante ejercicio. En primer lugar, Las personas con enfermedades cardíacas, presión arterial alta u otros problemas cardiovasculares deben evitar el trampolín. Los movimientos vigorosos que implica el salto pueden afectar negativamente al corazón, lo que aumenta los riesgos para la salud de estas personas. Por lo tanto, estas personas deberían considerar ejercicios más suaves y beneficiosos para el corazón al elegir actividades recreativas. Además, Se recomienda a las personas con problemas en las articulaciones, antecedentes de fracturas o dolor articular persistente que se abstengan de hacer trampolín. La fuerza de impacto generada al saltar puede exacerbar la tensión en las articulaciones, empeorando potencialmente el dolor o provocando más lesiones, de ahí la necesidad de precaución. Se recomienda que estas personas opten por ejercicios de bajo impacto para evitar una presión adicional sobre sus articulaciones. Por último, Las mujeres embarazadas también deben mantenerse alejadas de las actividades de trampolín.. Durante el embarazo, el cuerpo sufre cambios importantes, lo que lo hace más susceptible a sufrir lesiones. Los movimientos de alta intensidad de los saltos pueden plantear riesgos potenciales tanto para el feto como para la madre. Para garantizar la seguridad, se anima a las mujeres embarazadas a elegir formas de ejercicio más ligeras y adecuadas. Por lo tanto, al considerar actividades de trampolín, los grupos antes mencionados deben evaluar cuidadosamente sus propias condiciones, priorizar la salud y la seguridad y seleccionar métodos de ejercicio adecuados para mantener su bienestar general.